En Forma, Ejercicio y actividad física En forma de por vidaEn Forma, Ejercicio y actividad física En forma de por vida

SADM #61 Jul/Ago2015

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La mayoría de las personas, independientemente de la edad, pueden desempeñar algún tipo de actividad física. Incluso, si usted tiene alguna enfermedad crónica, como una enfermedad cardiaca o diabetes, aún debe hacer ejercicio. La actividad física podría más bien ayudarle.

Para casi todos los adultos mayores, caminar con paso rápido, montar bicicleta, nadar, levantar pesas y trabajar en el jardín son actividades sin riesgo, especialmente si las comienzan a realizar lentamente. Sin embargo, si usted tiene más de 50 años y no está acostumbrado al ejercicio activo, es recomendable que consulte antes con su médico. Usted también deberá hablar con un médico si presenta o padece de lo siguiente:

  • Un síntoma nuevo del que todavía no ha hablado con el médico
  • Mareos o respiración cortada
  • Dolor o presión en el pecho
  • Una sensación de que el corazón está saltando latidos, o palpitando acelerada o agitadamente
  • Coágulos sanguíneos
  • Una infección o fiebre acompañada de dolor muscular
  • Pérdida de peso no planeada
  • Lesiones en el pies o los tobillos que no sanan
  • Hinchazón de las articulaciones
  • Una retina desprendida o que está sangrando, una cirugía de ojos o un tratamiento de los ojos con rayos láser
  • Una hernia
  • Una cirugía reciente de cadera o de espalda Consejos preventivos

A continuación se encuentran algunas recomendaciones para asegurarse de que está haciendo ejercicio de la manera adecuada:

  • Comience de forma pausada, especialmente si no ha estado activo por mucho tiempo y vaya aumentando poco a poco las actividades y el esfuerzo que ejerce al hacerlas.
  • No aguante la respiración durante los ejercicios de fortalecimiento. Esto podría ocasionar cambios en la presión arterial. Al principio le puede parecer incómodo, pero lo correcto es inhalar mientras levanta algo y exhalar a medida que se relaja.
  • Use equipo preventivo. Por ejemplo, use un casco para montar bicicleta o zapatos adecuados para caminar o trotar.
  • A menos que su médico se lo haya limitado, asegúrese de tomar suficiente líquidos cuando esté haciendo ejercicio. Muchos adultos mayores no sienten sed, incluso si el organismo necesita los líquidos.
  • Inclínese siempre hacia delante desde la cadera y no con la cintura. Evite doblar la espalda; si su espalda se mantiene recta, es porque probablemente se está inclinando de la manera correcta.
  • Caliente los músculos antes de hacer ejercicios de estiramiento. Trate primero de caminar y hacer ejercicio con pesas livianas en las manos. 

El ejercicio no debe doler ni dejarlo muy cansado. Es posible que sienta un poco de molestia, incomodidad o fatiga, pero no deberá sentir dolor. Sin embargo, estar activo probablemente lo haga sentir mejor.

Para más información los gimnasios o los hospitales locales pueden ayudarle a encontrar un programa de ejercicios que le convenga. También puede averiguar sobre programas de ejercicios, de bienestar o de caminantes con grupos religiosos, centros cívicos y para ancianos, parques, asociaciones de recreación, YMCA, YWCA o incluso en los centros comerciales de su comunidad.

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